Crítica de 'Open Windows' (2014) de Nacho Vigalondo
Primero de todo y para que el lector no se asuste, intentare
a mi parecer ser lo más franco posible y recalcar que como autor de esta crítica,
ni me situó de parte de nadie ni me las quiero hacer ver de persona listilla.
Pienso ser objetivo aunque no lo consiga, duela o cree una completa escuela de
detractores. En mi opinión personal no me gusta suspender una película y esta no va a ser la excepción,
más que nada porque yo no soy nadie para hacerlo ya que considero que una
película es como un pequeño sueño o milagro personal hecho realidad y quiero
creer que hay cierta pasión tras ella aunque a veces no nos lo parezca. Desde
las producciones más modestas como esta hasta las grandes superproducciones anuales.
Por eso una crítica solo es una opinión personal y cada persona tiene una propia
idea de una misma película. Cada uno lo ve diferente, todo desde la base de su
propio prisma. Sino esta vida no sería tan divertida, todo radica en la
variedad y nada tiene una única visión.
Vamos por partes, y para hacerlo, primero empezaremos con un
poco de información previa que nunca está de más.
N. Vigalondo es un artista, no solo director de cine sino
que como mucha fauna que puebla este país se da a conocer por mostrar que es
capaz de hacer diferentes cosas; poseer diferentes rasgos; también escribe, produce,
actúa y ayuda a sus amigotes cuando estos no le ayudan a él; se atreve con
largometrajes, cortometrajes, segmentos cinematográficos, sketches, videoclips,
publicidad, tv, etc… y cuando quiere puede ser polémico o enrollado hasta plano
o innovador. Hasta ahí, todo bien, el sueño de cualquier creador que ha crecido
con cine, tv, música o comics… o sea con
el mejor material pedagógico que se le puede dar a un crio, y no señores, en
esto no miento para nada.
El subidón personal le sobrepasó con una lluvia de premios y
una repentina nominación al Oscar en 2004 por su estupendo cortometraje de
corte clásico 7:35 de la mañana, y posteriormente con la fresca, original y
personalmente imprescindible pequeña cinta de ciencia ficción sobre viajes
temporales “Los Cronocrimenes” (2007), su primera cinta de larga duración protagonizada
por el efectivo Karra Elejalde y la guapísima Bárbara Goenaga. Toda una
sorpresa fílmica.
En todas las proezas
destacados anteriormente el bueno de Vigalondo, siempre ha destacado por
sobreponer la idea al presupuesto por encima del material realizado, aspecto
que a veces ha jugado en su favor (tal vez en su primera y experimental etapa)
y a veces en su total contra (posterior y actual etapa la cual nos ocupa y vamos a centrarnos).
Por allá el 2011 esperábamos con curiosidad su próxima nota
en forma de largometraje y después de una gran carga de publicidad viral nos
sorprendió (para total decepción) con “Extraterrestre” lo que para muchos podía
haber sido otra original cinta de Sci-Fy, se quedó en un engañosa (¿comedia?) cinta
romántica en forma de sketch alargadísimo hasta el infinito cual “Kilométrico de
Boomer”; absurda, tediosa, ridícula y completamente innecesaria. Fuimos muchos
las victimas que nos preguntamos (ya que la cinta tardo lo suyo en llegar) en
que había empleado su tiempo. Vigalondo no se tomó en serio a él mismo.
Dicha “joya” (y perdón por la retórica) la protagonizaban Michelle Jenner, su gran amigo Carlos Areces y
un buenísimo actor como Julián Villagrán. Todo muy desaprovechado, más parecido
a un gag de sus amigos de “Muchachada Nui” que otra cosa.
Y llegamos a este 2014 con la “perla” (perdón por la segunda
retorica) que nos ocupa el día de hoy, lo que para muchos pensábamos que sería el esperanzador regreso a tierras un poco más serias y decentes, ”Open Windows”, su tercer largometraje y su primera incursión en
territorio americano.
Todo parecía esperanzador, su planteamiento, su premisa, sus
actores en ella; el ya europeo y productor Elijah Wood (casi repitiendo su
personaje que en la entretenida Grand
Piano de Eugeni Mira) y la ex -actriz de cine Pornográfica Sasha Grey (por lo
menos la elección actoral era curiosa), buenas señas en sus adelantos
promocionales y sus inminentes primeras críticas desde la otra punta del globo.
La cinta se caracterizaba por su “original” y elaborado montaje,
del que claramente recibió mucho más cuidado
que cualquier otro aspecto.
Siguiendo la moda de los ahora tan famosos “Mockumentary” (falso
documental)o “Found Footage” (metrajes encontrados), ya vista la cinta, podemos
afirmar que el director Cántabro va mas allá en éste aspecto y le da más apariencia de su querido programa
“Gran Hermano”, todo sucediendo en tiempo real y al mismo tiempo crea
diferentes transiciones con intención de cierta frescura o innovación, y un estilo narrativo que como su título indica,
sucede en la red y a modo de ventanas emergentes de sistema operativo en
ordenadores y otros dispositivos actuales de última generación, creando así
todo tipo de planos llenos de ángulos bien diferenciados a modo de vigilante y porque
no decirlo con alguna que otra idea original.
Vigalondo nos quiere hablar de acoso cibernético, de referencias
al fan dom, al mundo del porno con multitud de guiños entre realidad y ficción,
secuestros, y al mundo hacker (si Ignacio,
yo también vi Expediente X) y todo metido en la batidora y con calzador,
navegando entre el Slasher clásico o el thriller modernista pero todo de forma muy simple, barata, totalmente
plana y con unos personajes carentes de una mínima alma o empatía, todo muy absurdo
y repleto de clichés sin despertar ningún interés desde que nuestro querido Elijah
enciende la computadora y nos da su primer discurso.
La cinta no entretiene, se hace vacía, aburrida, pesada, monótona
e innecesaria y ni los cameos despiertan una sonrisa.
Y cuando al final nos creemos que la historia se arregla un
poco,”catacrack!!” el bueno de nuestro director vuelve a fallar metiéndose en
un terreno tal vez más personal pero incomprensible para todos nosotros, tal
vez toda esta idea funcionaria mucho mejor en el mundo del videojuego u otro
método más interactivo.
Personalmente no entiendo como estos títulos no salen
directamente al mercado doméstico o VOD, y tal vez rebajando el marketing que
le dan se engañaría menos al espectador que se siente bastante acorralado desde
su inicio.
La cinta está plagada de demasiados giros incomprensibles,
jugando en tierra de nadie y aunque sabemos que los medios la van a defender
como buen producto de factura patrio, nos encontramos ante mucho humo esparcido,
tiempo en vano y un buen sitio entre la estantería de los títulos más fallidos
de este año.
Ya empezamos a sospechar que el método Vigalondo es ir directamente
al cajón donde guarda todos sus cortometrajes escritos y dedicarse a estirarlos
hasta llegar a los 90-100 minutos con más relleno que el osito Teddy.
¿Nos preguntamos qué hacen este tipo de productos en la cartelera,
que se espera de ellos? Un sinsentido teniendo estupendos títulos anuales que
no llegan ni a tener la oportunidad de darse a conocer y teniendo en cuenta que existen nombres como
Bayona, Balagueró, Mira, Cortés, Maillo y más gente del sector… me pregunto… ¿hay
lugar para un Vigalondo y su trabajo ahora mismo? personalmente ninguno o
si uno quiere ponerse en plan
benevolente… “Sr. Vigalondo póngase al
final de la cola… “
'Open Windows' llegará a las carteleras el 4 de Julio.
Calificación: 5/10.
Gracias a eOne Entertainment por dejarnos asistir a su pase de prensa.
Comments
Post a Comment