Diario de un proyeccionista 4 / Desmontando a Alejandro Magno

Me huelen las manos, las uñas y el pelo a películas. Lo ha dicho mi Madre y será verdad. Hoy estaba sólo en cabina y encima era día de salida. Hasta cinco películas que volvían a casa. Bob Esponja, al fondo del mar, Carmen Maura a París, Robin Williams a la memoria de los muertos, Edward Burns a su idílico Hell's Kitchen y Alejandro Magno, a Macedonia. Desmontar una película es uno de los procesos más arduos y también duros que tiene el oficio de proyeccionista. Con la película en marcha, comienzas a desmontarla, de dos en dos bobinas o de tres en tres, depende. El público en la sala permanece ajeno al ajetreo en cabina y mientras la película va avanzando hacia su final, yo la voy devolviendo, desde la mesa de operaciones, a sus latas originales. Cinco, seis... diez, en el caso de "Alejandro Magno". Algún día debería filmar todo el proceso. No es sólo el hecho de desmontar la película, es todo lo que, a un nivel más profundo, significa esa última proyección. Al trabajar en un cine de "repertorio", pocas veces trabajo montando estrenos, por lo que de algún modo, todas las películas que me llegan, vienen a realizar su última función. Sus últimos quince, veinte, treinta pases. Una vez más, el cine se ha encargado de reflejar ese último momento y me acuerdo ahora de "The Last Picture Show", una de las grandes películas americanas de todos los tiempos. Nosotros todavía vamos a aguntar un pase más.

Comments

  1. Anonymous7:54 AM

    Ayer te dejé un comentario en el post anterior, que no aparece reflejado en la página normal de la bitácora porque hemos colapsado el espacio. Para verlo tienes que entrar como si fueras a escribir otro nuevo. Pero vamos que tampoco es tan interesante.
    Aquí te dejo un enlace para que le eches un vistazo cuando tengas tiempo y para que sepas por donde estaré los primeros días de marzo: http://www.fantastico.uma.es/

    Un saludo,
    Ihara.

    ReplyDelete
  2. No tengo ni idea de lo pudo colapsar el espacio. ¿El espacio se puede colapsar? ¿Existe el ciberespacio?...Supongo que durante esos primerós días de marzo, todo será posible, el menos en Málaga. Tengo que reconocer que no tenía idea de la existencia de esa semana de cine fantástico pero por lo que he podido "surfear" no tiene mala pinta, la verdad. Me encantaría pasarme por alguna de sus secciones, pero bueno, espero que al menos me tengas informado, Ihara. Pásalo bien y ponme al día! Un saludo

    ReplyDelete
  3. Anonymous11:53 AM

    Como ya no coincide con la semana blanca (una semanita de vacaciones en febrero) y como este año echo horas mañana y tarde, podré ir a muy pocas; pero ya te contaré.
    De todas formas no es gran cosa aunque nos pone en contacto con un cine que difícilmente llega a Málaga.
    Un saludo,
    Ihara.

    ReplyDelete
  4. Bendita semana blanca... siempre fue de mis vacaciones favoritas cuando iba al colegio, no porque aprendiara a esquiar ni nada por el estilo, si no porque eran las únicas vacaciones en las que el resto del mundo... no estaba de vacaciones. Es decir, por televisión no cambiaban la programación porque los niños estaban de vacaciones, tus padres seguían trabajando y tu disfrutabas de ese extraño pero fascinante don que es una mañana de un martes cualquiera... sin clase. Una mañana, donde todo es nuevo y en nada parecida a la mañana de un sábado, un domingo o un lunes de Semana... Santa.

    ReplyDelete
  5. Anonymous12:55 PM

    Pero bueno, si yo creía que la semana blanca era privativa de estos lares sureños. Llevas -de todas formas- razón en que esas vaciones son diferentes a todas las otras.
    También he leído tu post de Sandra Dee y te recuerdo una muerte más: la de Hunter S. Thompson, cuyo "Miedo y asco en Las Vegas" fue llevada al cine con más pena que gloria, si no me falla la memoria.
    Un saludo,
    Ihara.

    ReplyDelete
  6. Debes saber, buen Ihara que yo soy natural de Granada, bien cerca de Málaga aunque el destino, la geografía y otras cosas mas importantes me tengan lejos... de cualquier sitio conocido. Por supuesto que tuve semanas blancas y fueron geniales. De Málaga todavía no conozco mucho. He estado de acá para allá, superando frontera trás frontera sin echar un vistazo a lo que tenía a mi alrededor. Alguna vez tendré que subsanar los desperfectos y visitar a algunos amigos que tengo por ahí. ¿Terminó ya tu baja entonces?

    ReplyDelete

Post a Comment