La Nominación de Villagrán Y Lo Aburrido De "El Orfanato"

Una de las características de los Premios De la Academia de Cine Español es el abultado número de nominaciones que consiguen las películas. Normal. El pastel se suele repartir entre un reducido grupo de títulos y a pesar de que este año se han estrenado 142 películas españolas, entre seis o siete trabajos se han hecho con el trozo mas grande del pastel. Recuerdo todavía con estupor las 19 nominaciones (!) a "Ay Carmela!" y como no, los 14 Goyas (!) a "Mar Adentro". En la XXII edición podrían repetirse números si "El Orfanato" arrasara, tal y como está previsto, el próximo mes de enero. Pero vamos por partes. El trabajo de Juan Antonio Bayona es junto al drama histórico revisionista "Las 13 Rosas" de Emilio Martínez-Lázaro las películas que acaparan mayor número de posibilidades: catorce cada una. Una cosa está clara después de desmenuzar cada una de las categorías: no ha sido un buen año de cine español y encima, dejan fuera a Jose Luis Garci. Su último trabajo, "Luz de Domingo", preseleccionado para los Oscars, se ha descolgado de las categorías principales en favor de "La Soledad" de Jaime Rosales, film fantasma que nadie ha visto ni ha querido ver a pesar de las buenas críticas. La Academia se deshace así de uno de esos iconos malditos que de cara a la audiencia daba a los Goyas una imagen de inmobilidad y porqué no decirlo, un olorcillo a rancio que echaba para atrás. Con Garci quitado de en medio por clamor popular, los Goyas re recocijan en festejar la inestable salud del cine nacional en un año en el que de no ser por los taquillazos de "El Orfanato", "[REC]" y "Las 13 Rosas" se hubiera mostrado herido por fatalidad.

Cabe festejar entonces que hemos sobrevivido y celebrar también la exultante creatividad de autores como Gracia Querejeta y Ventura Pons, la sensibilidad que transmite la mirada de Maribel Verdú, el trepidante desasosiego de la Filmax, la rabiosa modernidad de Gonzalo Suárez y cabe celebrar por fin, que Julian Villagrán ha sido nominado como Mejor Actor de Reparto.

A la hora de hablar de favoritos, quinielas, pronósticos y demás absurdeces, me quiero decantar por la sorpresa. Me gustaría pensar que la Academia, en un año en el que ha puesto las cosas sobre la mesa y ha rescatado a títulos como "La Soledad" o "7 Mesas de Billar Francés" de las categorías de letras, fuera consecuente y premiara el magnífico trabajo de Gracia Querejeta como Mejor Película y Mejor Dirección. Me gustaría pensar que Maribel Verdú se tomaría la revancha por la Concha de Plata que Blanca Portillo le mangó en Donosti y consiguiera por fin, su primer Goya; nadie como ella lo agradecería mas. Me iría a la cama mas en paz con el mundo en el que vivo si alguien dijera en voz alta lo que mucha gente piensa: que "El Orfanato" no es tan buena, si no todo lo contrario. Que es aburrida, predecible y carente de nuevas propuestas y que premiarla como Mejor Película del Año o Mejor Actriz (los dos premios mas predecibles) sería un auténtico despropósito. Pues venga, vamos a soñar.